Consejos sobre cómo poner a tu perro a dieta

Hace una temporada ya hablamos de un problema que va en alza entre los perros domésticos como es la obesidad canina. Muchas veces sin darnos cuenta, sobrealimentamos a nuestros perros, éstos engordan demasiado e, incluso, pueden llegar a puntos hasta críticos para su salud. Por ello, si vuestro compañero ha sobrepasado los límites de peso ajustados a su raza y condición, será necesario ponerle a dieta.

Por ello, qué mejor momento para hacer un repaso a unos consejos básicos y muy fáciles de seguir para conseguir que vuestro perro pierda peso. Eso sí, igual que en los humanos, se tratará de un camino progresivo, que puede ser lento, pero que hay que hacer equilibradamente para que elimine los kilos de más y evitar que pueda tener problemas más serios. Así que veamos qué pasos podemos seguir en esta tarea.

Lo primero, como siempre en estos casos, será necesario acudir al veterinario que será el que le tenga que diagnosticar la situación del perro y será el que marque las pautas de la dieta que en cada caso se deben seguir. Además, le tendrá que examinar no sea que por el tema de la obesidad canina pueda padecer alguna enfermedad relacionada con ese tema.

En todo caso, se pueden aplicar unas normas básicas a la mayor parte de los casos de dieta que ayudarán a nuestro perro a perder peso en condiciones.

Elegir un pienso especial

Lo primero para poner a dieta a tu perro será elegir un producto alimenticio adecuado a sus necesidades. Procuraremos elegir piensos que sean de los calificados como lights, que sean bajos en calorías y grasas, pero que, aún así, le aporten los nutrientes necesarios a su situación y edad. En todo caso, las raciones deberán de reducirse considerablemente, pero siempre de acuerdo a su condición, tampoco podemos dejar de alimentarle debidamente, no es cuestión de que pase un hambre voraz, sino de que coma equilibradamente pero sujeto a una dieta.

Si tenéis un perro de los que no se sacia fácilmente y puede comer cantidades enormes de comida, incluso sin masticar, existen también piensos especiales cuya función es precisamente saciar ese hambre, cosa que os puede venir muy bien. Además con este mismo fin de saciarle un buen punto sería darle porciones más pequeñas de comida pero con mayor frecuencia, así comerá más a menudo, no estará tan hambriento ya que sentirá que su estómago no está vacío. Por tanto, la cantidad diaria recomendada se dividirá en varias tomas.

Un punto importante si tenéis varios perros que convivan juntos y no todos tienen ese problema de la obesidad, es que coman por separado, cada uno en un espacio distinto para evitar que coman más deprisa, más de lo que debieran o menos (según los casos), así que separad a los gorditos del resto a esas horas.

Evitar o reducir las golosinas

Personalmente si estamos ante casos de obesidad canina directamente eliminaría las golosinas de su dieta porque contienen muchas grasas. Si aún así sois de las que las creen imprescindibles para premiar a vuestro perro, optad una vez más por las que sean bajas en calorías y tratad de reducirlas al máximo, aunque también sería un buen momento para probar otro tipo de premios como las caricias y las felicitaciones que a ellos les saben muy bien también.

En este punto entraría también todo tipo de picoteos. Es decir, igual que nos pasa a los humanos que lo que más nos engorda es el comer entre horas y esos picoteos furtivos que tanto nos gustan, a ellos también. Así que nada de darles restos nuestras comidas. De hecho, sería conveniente que si está acostumbrado a que siempre le caiga algo en esas horas, mejor que le encerréis en otra habitación mientras coméis o preparáis la comida, así tampoco se sobreexcitará. Si aún así no sois capaces de retenerlo en otra parte de la casa y no podéis resistir la tentación de darle algo mientras coméis, una solución sería precisamente darle de su propio alimento balanceado, así como que nos “engañamos” mutuamente.

Aumentar el ejercicio de tu perro

Si estamos ante un perro sedentario habrá que comenzar a moverle. Si se trata de casos en los que, incluso, le cuesta le podemos ayudar a moverse con ejercicios en casa, cosas simples que empiecen con movimientos de patas, que se desplace de un lado a otro, para ir dando paso a un mayor ejercicio.

En todo caso debe ser algo gradual, como siempre. Debemos empezar por tiempos cortos y ejercicios más limitados para ir aumentando el ritmo y el tiempo, igual que si se tratase de nuestro cuerpo. Una forma de comenzar esta etapa sería por ejemplo motivándole a jugar. Hace unos días hablábamos de cinco juegos muy básicos e interesantes, que ayudan a nuestro perro a mantenerse activo. En este caso, el entretenimiento de la pelota sería muy adecuado.

Además, es importante que vuestros paseos con él se incrementen. Una vez más, poco a poco, de acuerdo a su edad y condición. Podéis comenzar con paseos cortos y cada menos tiempo, para ir progresivamente ascendiendo hacia un mayor ejercicio y duración, incluso podéis optar cuando vaya estando en mejor forma por salir a correr con él, algo que seguro que nos vendrá muy bien a los dos, tanto a él como a nosotros mismos.

No saltarse la dieta

Este es un punto que nos tiene que quedar claro. El típico comentario que todos nos hacemos de “por un día no pasa nada” mejor que no se os pase por la mente porque de nada valdrá entonces tanto esfuerzo. Es algo contraproducente para vuestro perro y es algo que no queremos. Así que si está a dieta sed rígidos y tened paciencia con todos los puntos, tanto en alimentación, premios, chuches y ejercicios, os lo agradecerá aunque penséis lo contrario.

Si seguís estas pautas tan básicas a la hora de poner a dieta a vuestro perro, ya veréis como poco a poco va recuperando su peso ideal y vuelve a estar plenamente en forma y con un estado de salud totalmente aceptable. Eso sí, como siempre, es mejor prevenir que curar, así que procurad vigilar su día a día dándole cantidades de comida que sean suficientes, cumpliendo con sus paseos y ejercicios necesarios y demás, seguro que no será necesario que le pongáis a dieta porque estará en su peso ideal.