Estoy cien por cien segura que todos alguna vez les hemos dado a nuestros perros les hemos dado un trozo de pan. Un gesto de lo más común en todas las casas en las que hay perros, las cosas como son. Seguro que a la mayoría de vuestras mascotas les suele encantar ese pellizco de corteza y miga y lo disfrutan, otros por su parte serán de los que si no está el cacho mojado en algo pasen olímpicamente.
Por ello, cabe preguntarnos sobre las ventajas y desventajas del pan en la alimentación de nuestros perros, de forma que podemos descubrir que podemos tener un gran aliado a nuestro lado para cubrir alguna que otra necesidad que puede sorprenderos. Así que veamos por partes.
El pan duro es un gran aliado para nuestros perros
Aquí vas a encontrar
Pues sí, ahí donde lo veis lo que realmente es muy bueno para los perros no es ese pan del día que traemos blandito a la par que crujiente. No, lo que les conviene más es el pan duro. ¿Y por qué? ¿Qué puede aportar el pan duro a los perros? Pues muy fácil, lo podemos usar de diferentes formas:
- Como premio. Para todos aquellos perros a los que les chifle el pan, será una buena forma y muy natural de premiarles por una buena conducta, una buena forma de reforzar los comportamientos positivos de nuestro perro.
- Como entretenimiento. Está claro que al ser un trozo duro no lo podrán comer de una vez, lo que les supondrá un excelente entretenimiento y hasta un juego con el que puede estar hasta horas mordiendo y royendo el mismo, por ello seguro que estará más que encantado.
- Como modo de limpiar su dentadura. Quizá este sea el punto más importante que hay que destacar del uso del pan duro en los perros, precisamente que nos puede ayudar a limpiar sus dientes. Si sois de los que no tenéis mucho tiempo para dedicarles un buen cepillado como es recomendado que simplemente sois descuidados, darles un cacho de pan duro de forma habitual, como una vez a la semana o así les ayudará a limpiar el sarro que se les acumula en la dentadura por la fricción que el mismo hace sobre sus dientes al masticarlo. Claro que en ningún caso se puede considerar como un pleno sustituto de la higiene oral que hemos venido hablando por Es Cosa de Perros, una cosa es que ayude y otra que sea lo único que usemos para tratar la salud bucodental.
Precauciones a la hora de dar pan a nuestros perros
Igual que nos pasa a los humanos con el pan, el aporte de hidratos de carbono es muy elevado, ya que al fin y al cabo es harina y levadura, lo que supone que es necesario que lo controlemos bien, que procuremos no darles a diario, sobre todo si son perros que pueden tender a la obesidad, para evitar que cojan peso de más. Vamos que si a nosotros nos engorda a ellos también por lo que es un punto a tener en cuenta. Además todo lo que se salga de su dieta les aportará más calorías de las necesarias, así que habrá que compensarlo.
El pan blando no es tan bueno para nuestro perro
Por otra parte como vemos lo bueno es el pan duro, de varios días ya que el blando no es tan bueno como parece. En este punto cuando comen pan del día por efecto de la levadura y de la fermentación en los intestinos podrían tener problemas gástricos y, sobre todo, bastantes gases. Claro que esto se dará normalmente si abusamos de ello y de cada perro, al mío por ejemplo no le pasa absolutamente nada.
En resumidas cuentas, siendo comedidos, podemos encontrar una salida a todos esos trozos de pan que van quedando en la panera y que en lugar de acabar en la basura nos pueden hacer un flaco favor a nosotros y a nuestros perros.
Me quedo sorprendida… mi madre es la típica que suele darle pan a dos perritos que tiene en casa y yo siempre cuando he ido a su casa le he reñido porque no me gustaba que se lo diera y ahora nos enteramos de que es bueno dárselo, pero siempre con moderación claro. Muy interesante…!